Héctor Chazarreta seguirå siendo el técnico de Las Palmas.
Por este motivo hoy les traemos su historia, “su rica historia”. Ex jugador y
con un historial futbolĂstico digno de ser plasmado en las leyendas populares
del barrio, hoy les presentamos un poco de lo que fue su magia.
Por Lucas Llerena
Competir contra Maradona o Bochini, ganar un campeonato
nacional en primera divisiĂłn, jugar en el exterior, ser protagonista en los
clubes mĂĄs grandes de CĂłrdoba. AlgĂșn despistado puede imaginarse que estoy
contando el sueño de un pibe de la liga, pero no, esto es solo una puntita de
lo que fue la exĂłtica y gloriosa carrera futbolĂstica del hoy DT de Las Palmas,
HĂ©ctor Chazarreta.
Nacido un 10 de Agosto de 1955 en San Miguel de TucumĂĄn, el
“Chaza” viene de tener un 2015 sumamente positivo al mando del equipo del viejo
camino a La Calera
en lo que respecta al Federal B, a tal punto que esa campaña ya quedarå en las
vitrinas histĂłricas azules, siendo esta la segunda mejor de la historia en esta
competencia afista (detrĂĄs de la 2013/2014 cuando eran dirigidos por Leandro
Chiatti). QuizĂĄs este sea el mayor motivo para que la dirigencia haya apostado
de vuelta por Ă©l.
Pero en fin, detrĂĄs de ese gran DT existe un ex jugador que
sin dudas gastó bien los tapones de sus botines. Con apenas 15 años debutó en
su provincia natal, en el club Tucumån Central para luego pasar a Atlético
Ledesma donde estuvo tres años. Su juego era una delicia y las propuestas no se
hicieron esperar, Rosario Central lo sumĂł a sus filas.
Jugando para el Canalla fue donde Chazarreta engrosĂł su
historia, consiguiendo el tĂtulo nacional de 1980 con una anĂ©cdota que es una
joyita: “En Central juguĂ© absolutamente en todas las posiciones, hasta la 1 me
puse. Cuando fuimos campeones hubo un partido en la ida de los cuartos contra
UniĂłn de Santa Fe que tuve que ponerme los guantes por que nos expulsaron al
arquero que en ese momento era Ricardo Ferrero. Y como ya tenĂamos los cambios
realizados, pedĂ ir al arco ya que en los picados a veces me gustaba atajar.
Por suerte quedĂł el arco en 0 en ese encuentro”.
AdemĂĄs de marcar 50 goles con el equipo Rosarino, tuvo la
dicha de enfrentar a los mejores de esa Ă©poca, y no estamos hablando de nenes
de pecho sino de jugadores de la talla de Diego Maradona, Ricardo Bochini, Beto
Alonso, Chocolate Baley, entre otros. “Verlo jugar al Diego es un espectĂĄculo
algo asombroso, tiene una tĂ©cnica Ășnica y trata a la pelota de una forma
increĂble. Yo lo enfrentĂ© en varias ocasiones, la primera fue jugando para
Argentinos con 16 años y después en Boca. Lo ves y te dan ganas de salir de la
cancha y sentarte en las tribunas para aplaudirlo”.
El Chaza tambiĂ©n exportĂł su talento a otros paĂses, teniendo
un paso por Independiente de MedellĂn (Colombia) y Hamilton Steelers (CanadĂĄ).
Obviamente era ilĂłgico no codearse con los nuestros, con nuestro fĂștbol. Y su
romance con el fĂștbol CordobĂ©s tuvo como protagonistas a Racing y Talleres
(Equipo donde se retiro en 1995).
Existen mĂĄs historias de Ă©l, mĂĄs clubes, mĂĄs goles. Hoy
nuestra liga tiene el privilegio de tenerlo como protagonista, sentado en el
banco pero transmitiendo toda una vida de buen fĂștbol.
El Viejo Camino a La Calera lo espera nuevamente con los brazos
abiertos en este 2016, su meta es seguir haciendo historia con los Azules. SĂłlo
queda esperar para ver los resultados, mientras tanto no deje de pedir palmas
Chaza.