En el barrio se respira otro aire. Todo está mucho mejor que en aquel descenso de 2015. En Bella Vista se planifica un año cargado de éxitos. Al menos, trabajan para eso.
Volvió Luis Chaca Ludueña como DT y la dirigencia presidida por Carlos Laje le armó un equipazo. A los que ya estaban se sumaron varios con experiencia y buen pie.
Desde Los Andes llegaron Pablo Hernández, Esteban Mozzarechia y Ricardo González. Además volvieron Marcos Bracamonte, Misael Sueldo y Leandro Ludueña. Y se sumaron Federico Colautti, proveniente de Avellaneda, Iván Herrera y Nicolás Valderrama.
El cuerpo técnico se completa con Matías Ludueña, hijo del DT, como ayudante de campo y entrenador de arqueros, Guillermo Allende como preparador físico, y Mercedes Vigliano es la médica del plantel.
Además se está haciendo un gran trabajo en divisiones inferiores, bajo la coordinación de Adán Valdez y Walter Mariño, con el fin de tener completas todas las categorías y poder pelear el ascenso. Algo que en definitiva es el único objetivo posible. El sueño de volver a la A.
