EL TANQUE VOLVIÓ DESPUES DE DOS AÑOS


Leandro Bessone se rompió los ligamentos de ambas rodillas y se recuperó. Volvió hace unas semanas para colaborar en el gran momento de Las Palmas. Ejemplo a seguir.

Por Julio Oronado 

Hay que tener Factor H para romperse los ligamentos cruzados de una rodilla, parar un año para recuperarse, y a los 20 minutos de su vuelta tener la misma lesión en la otra pierna. Hay que ser como Bessone para volver. 

Y ahí anda el 9, entre medio de los centrales, ganando (casi siempre) de arriba, aprovechando su altura. Y tratando de ser importante en el actual campeón de la Liga. Además ganarse su lugar en el plantel del Federal.

"La primera lesión fue en 2015, contra Barrio Parque en su cancha (la derecha), volví en 2016 contra Lasallano en cancha nuestra y a los 20 minutos se me cae uno encima y se me rompe la otra. Cada rodilla me costó aproximadamente un año en recuperarla".

No fue fácil, claro. Los fantasmas del retiro asomaron más de una vez. No es fácil prepararse un año entero para volver a lo mismo en 20 minutos. 

"Con mucha fisio, esfuerzo, ayuda de mi familia, mi novia, que fue muy importante en esto, así como mis compañeros que nunca dejaron que me rinda. Cada vez que intentaba volver y las rodillas no me lo permitían, pensé mil veces en dejar".

"Pero las ganas, el amor que le tengo tanto al fútbol como a mi club Las Palmas me daban más y más fuerzas para seguir. Y acá estoy. Volviendo de a poco, todavía no al 100%. Pero cada vez más cerca".

Siempre jugó en la Palmas. En 2009 Dario Cavallo lo hizo debutar y ese mismo año lo llevó a Belgrano, pero no tuvo suerte y volvió a Las Palmas. En el Viejo Camino a la Calera tuvo su gran momento en el Argentino B 2013. Si bien las chances fueron pocas por tener a Gustavo Gotti como titular, pudo aprovechar cada minuto en cancha.

Pensó mil veces en largar, pero las ganas y el amor al club fueron más fuerte. Si la ayuda de entorno no hubiese sido posible. Las Palmas tiene a un grandote en el área para pelear el puesto. Un Tanque.