SIMES, EL SANTO TURCO


Joya de los 40', capaz de brillar en cada una de las estratosferas futboleras que le tocĂł habitar. Aunque en nuestro ĂĄmbito, la eterna canonizaciĂłn sanlorensita supere cualquiera de todos los mayĂșsculos pergaminos que consiguiĂł.

¿Cuantos grandes Ă­dolos argentinos fueron prĂłceres o bien reconocidos por todas las camisetas que vistieron?  A decir verdad, solo un selecto grupo. 

Un par de ejemplos: Mario Kempes, Ă­dolo absoluto en Instituto, Rosario central, SelecciĂłn Nacional y Valencia español.  Roberto Perfumo, es otro de los que carga con tamaña distinciĂłn. Eterno Ă­dolo y caudillo del combinado celeste y blanco, River, Racing porteño y Cruzeiro brasileño.

Es por eso que, sin demasiados litigios, nuestro Llamil Simes (19/3/1922 - 20/2/1980) tambiĂ©n porta con este escalafĂłn de "Ă­dolo masivo". 

En el estadio estĂĄ inmortalizado con "Y", pero su nombre era Llamil

"Llamil comenzĂł a jugar en San Lorenzo  junto a otro prĂłcer del fĂștbol cordobĂ©s como lo fue SebastiĂĄn Viberti. Luego, en 1947, fue vendido a Racing de Avellaneda. Con dicha operaciĂłn, el club comprĂł el terreno y las instalaciones de la hoy cancha de San Lorenzo", nos asesorĂł Daniel Tico RĂ­os, ex futbolista, actual entrenador y formador, y eximio conocedor de la historia del club azulgrana.

Cabe destacar, que el estadio turco, ubicado en las calles Belardinelli y Guardado de barrio Las Flores, fue bautizado con el nombre de Yamil Simes en homenaje a lo que este le brindó a la institución dentro del campo, pero también como gesto de agradecimiento por lo que significó para el crecimiento del club aquella transferencia.

En Racing, el Turco Simes formĂł un quinteto inolvidable junto a Salvini, Mendez, Sued y Bravo, con los que logrĂł en siete temporadas,  el tricampeonato de 1949/1950/1951, y se convirtiĂł en el tercer goleador histĂłrico de la Academia con mĂĄs de 100 goles.
Paralelamente, Simes se hizo tiempo para romperla en la SelecciĂłn Argentina, pero nunca terminĂł de afianzarse por la superpoblaciĂłn de cracks de la talla de  Omar Labruna, Juan "Charro" Moreno, RenĂ© Pontoni, su compañero racinguista Tucho MĂ©ndez, entre otros.

Su trĂĄnsito por el fĂștbol grande finalizĂł en 1956 con un buen desempeño con la casaca de Tigre, y contabilizando 156 anotaciones, marca que lo ubica entre los primeros 30 goleadores de la historia del fĂștbol argentino.

Y para reafirmar aĂșn mĂĄs el mote de " Ă­dolo masivo",  pero ante todo de "prĂłcer turco", despuĂ©s del Matador de Victoria, regresĂł a su casa.

" Cuando terminĂł su paso por el fĂștbol nacional, Simes volviĂł para jugar en San Lorenzo de CĂłrdoba, y posteriormente se convirtiĂł en tĂ©cnico del primer equipo", recuerda Tico Rios, que no quiso dejar de mencionar que: " San Lorenzo es un club, que ademĂĄs de Llamil Simes,  histĂłricamente ha sacado grandes futbolistas como SebastiĂĄn Viberti, Bernardo Patricio Cos, Luis Hacha Ludueña, Jose Luis Villarreal- de quien fui compañero-, Daniel Ludueña (hijo del Hacha), el Flaco Del RĂ­o o Cristian Romero, juvenil sub 20 de  selecciĂłn argentina, que se formĂł en nuestra escuelita y en la actualidad estĂĄ en el GĂ©nova de Italia".

Agradecimiento: a Daniel Tico RĂ­os, por su prestancia para este homenaje, pero tambiĂ©n por el fabuloso aporte testimonial  que nos facilitĂł.